Estrés y alegría a partes iguales. Ya es primavera aunque no llueva (los sistemas de riego casi los tengo programados como si fuera verano, ¡en abril! y se ha adelantado la floración de las rosas), fustrante pero bueno, quiero creer que son ciclos. Vendrán temporadas más lluviosas. A pesar de ello, empiezan a verse los resultados de los cuidados del pasado invierno.
Rosas, lilos, calas, azaleas, camelias son, generalizando y entre otras, las protagonistas en los jardines que cuido.
Por no hablar del césped que necesita corte cada semana casi.
Trabajo, mucho trabajo, lo esperable ¿no?
Algunas fotos de muestra:
¿Quién no puede ser feliz teniendo estas vistas de amaneceres en Madrid?